Los sentimientos viles del ser humano, son alimentados por las carencias materiales y espirituales.La pobreza es el perfil transversal de nuestro país, es la responsable de que elijamos la complacencia, el silencio y la mentira para nuestro beneficio particular.
En la era digital, del conocimiento, la información, los inteligentes ganan espacios merecidos, hablamos de filosofía, política, económica y de luchas sociales.
Nuestra infancia, marginada, alienada, incuba en nuestro cerebro esa burbuja individualista de superar esas condiciones de miserias, algo natural cual palma sola exhibicionista, consumista, que nos lleva a ser fraudulentos.
El Trujillito, esta manifiesto en la anulación: por temor, soborno, robo, crimen, represión, mentira de la participación de las fuerzas nacionales organizadas sensatas, verdaderos actores y autores del desarrollo social.
La organizaciones de bases, las instituciones, los poderes del Estado son instancias donde sebamos ese personaje perverso, que se traduce en hacerme rico de la noche a la mañana y en dirigir con el criterio individualista las expresiones organizadas de la sociedad.
La dialéctica social, nos muestra las luchas intestinas, permanentes, en donde la pobreza del país es superior al 50% y mayor que la media del Caribe y de America Latina, pese a ser ricos en oro, ríos, valles y mares.
Es natural, que usted, de los de a pie, los de motocicleta, cuando llega a un parqueo vigilado, a un escenario, a una actividad donde hijos de la pobreza, hemos dado el salto material de la abundancia, sienta el rechazo, el desprecio por el que trabaja.
Este sentimiento individualista, al ser rechazado, nos lleva a buscar los medios de superar la marginalidad, buscamos los más inteligentes: las profesiones, la religión, los partidos, las fundaciones, las ONGS, las academias, y las organizaciones sociales. Los menos inteligentes e instruidos trabajan durísimo, otros, una minoría se refugian en los vicios, la violencia, los atracos, el crimen y el narcotráfico.
Las tres hermanas Mirabal lucharon contra las miserias humanas dominantes en el ambiente, dieron su vida.
Medio siglo después, Jaime David, vástago de esa honorable y sacrificada familia hace causa común con su prima hermana, Minu Tavarez Mirabal y denuncia el poder ganado en la dirección de la sociedad y reproducida en todas las clases sociales y el Estado.
La sentencia que cercenó el parque del Este, Bayahibe, y hoy amenaza el área protegida del Monumento Natural Cabo Samaná, lo que pasa en Samana es parte de este concierto.
Actitud responsable al denunciar el conciliabulo, de los sin buenos valores en la historia de su árbol genealógico, de querer maniatar el Tribunal Constitucional y Suprema Corte de Justicia. Igual esperamos reivindique su aseveración hace tres años de que el Yaque del sur era el responsable de la inundación de 283,000 tarea en la hoya del Lago.
Es tiempo de enfrentar la pobreza, la injusticia y la corrupción, donde el yo nuestro, no sea la expresión organizada de la sociedad.
La vorágine, las lenguas de fuego, quemantes, que vierte la miseria material y espiritual esta por erupcionar.
Busquemos, lo mejor del ser humano, la solidaridad, la justicia, el amor y hagamos un arco iris, que un sol radiante y luna llena, llena de amor, iluminando los recovecos donde se esconden nuestras miserias y diversidad de colores sean nuestra guía.
Reivindiquemos los valores de las Hermanas Mineral y las grandes figuras, que abandonaron sus riquezas para que superáramos esta ignominia, que 60 años después es el pan de cada día.
Regresemos a la filosofía, política y acciónales sembradas por Juan Bosch, en sus obras encontramos, de donde venimos, que somos y que haces para lograr un bosque social, donde prime el trabajo, la dignidad y la felicidad.
Reflexionemos y actuemos en consecuencia.
